El vigilante será responsable de garantizar la seguridad y protección de las instalaciones, bienes y personas dentro del área asignada. Entre sus funciones se incluyen realizar rondas de vigilancia, controlar el acceso de personas y vehículos, monitorear cámaras de seguridad, responder ante situaciones de emergencia o incidentes, y redactar informes diarios de novedades. Además, deberá brindar atención cordial y oportuna al público, orientando y apoyando a visitantes, residentes o personal interno, manteniendo siempre una actitud profesional y enfocada en el servicio al cliente. Se requiere puntualidad, responsabilidad, discreción y capacidad para actuar con criterio ante situaciones imprevistas.